Siguiendo la línea del reggaetón romántico de artistas como Maluma, J Balvin o más antes los titanes de Wisin y Yandel, este proyecto de México cumple cabalmente con un tema bailable y bien producido que no decepciona según los estándares del género. La base rítmica, como era de esperarse, se conforma de un tumpa tumpa clásico (saludos al maestro Chombo), sobre el cual descansan cómodamente sintetizadores, pianos y pads discretos que permiten destacar las voces y obviamente, el ritmo.
Hay cuando menos dos voces solistas distintas, una de ellas posee un timbre bastante interesante más cercano al pop. Sin embargo, funcionan las dos bastante bien en contexto. Dosis exacta de afinador digital y una breve sección rapeada que no desentona pero tampoco aporta demasiado. Se agradece el hecho no haber usado un falso acento caribeño que es un error que muchos aspirantes cometen, en cambio, la dicción es clara y nítida. Un mérito más.
Un track hecho para la pista de baile y
para la alcoba. No tiene desperdicio.
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