Tremenda
balada acústica de gran intensidad y alto romance. Para todos los enamorados.
En esta ocasión
estamos frente a un trabajo serio y bien enfocado desde la composición, instrumentación,
estructura y por supuesto, ejecución. Se trata de un tema que descansa casi por
completo en una guitarra acústica arpegiada, acordes de piano marcados en el
estribillo y en la voz; que interesantemente (según mi juicio) utiliza la
palabra “ebrio” (drunk) como sinónimo de “enamorado” y una vez que se toma en
cuenta este pequeño detalle, es posible hacer sentido del resto de las
palabras. El autor hable de un profundo enamoramiento y de una persona de
cualidades incalculables. Toda una oda romántica honesta, orgánica y altamente
identificable.
Lo segundo que llama la atención (aparte del ingenioso recurso lírico), es la acertada selección de notas en la voz; durante los versos y especialmente los remates melódicos del estribillo que proveen profundidad y mucho valor de entretenimiento. Dentro del marcado minimalismo de la pieza en general (hay momentos en que las voces parecen desarrollarse a capella sin acompañamiento alguno) es importante mencionar lo difícil que es lograr ese carácter épico, casi hímnico, sin perder un ápice de la intimidad que sugiere tanto la temática como la escasa instrumentación.
Gran
propuesta del cantautor MICHA. Échenle una oída.
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